Siempre tambaleante
Las comedias humanas a veces son tan bellas desde sus tragedias que nos permiten aceptar a un Romeo que mata a su rival por su amor a Julieta. Mas si bien es cierto que el arte literario se basa a menudo en la realidad que nos rodea o en la fantasia de un autor, las vivencias de los más desamparados de la sociedad de consumo actual, son más impresionantes que la de poemas fantásticos que reflejan su realidad.
Desde Alicante, recibi una emotiva misiva, que quiero dar a conocer. Su contenido está lleno de sentimientos, de comprensión, de empatia y, porqué no decirlo, también de amor al ser humano en toda su complejidad. Su autor es un enfermero que trabaja con los más necesitados de su país, lo cual coincide con lo que yo hago en mi propia realidad en Suecia..
Con sus defectos y virtudes, con sus esperanzas y desilusiones, y también con la resignación del perdedor involuntario que nada ha obtenido de la sociedad que lo rodea, pero que deja un pedazo de su vida estampado en un poema maravilloso, presenta mi colega español una poesia póstuma de alguien que murió, impresionante en su contenido.
Durante una entrevista con un paciente - una persona sin hogar - con un grave problema de alcohol (como tantos otros) del que posteriormente moriría, me dejó un papel en el cual imprimió sus emociones más profundas. Ese lamento, esa tristeza que como muchas veces otras personas son incapaces de expresar con la palabra. Pero este hombre que en otros momentos fue respetado y admirado - artista, escritor, periodista, político - reflejó en estas letras su dolor.
Hoy, años después he visto que esas letras habían sido borradas por el tiempo de ese viejo legajo que me dió, he tenido que traducir el texto de la impresión marcada sobre el papel. Ahí os dejo esas palabras de dolor.
Muchas veces me planteo mi cometido, mi trabajo, esas dudas expresadas por compañeros y amigos de por qué pudiendo tener un trabajo más similar al de otros enfermeros estoy donde estoy. Entonces me acuerdo que soy de ayuda para otras personas y que no puedo ser de más ayuda en otro sitio que aquí.
P. Rodríguez
Tambaleante
Siempre tambaleante
Pasos imprecisos, más constantes
Engaños, mentiras, a ti, a mi, al otro
Caminos inseguros
Caminos sin fin
Y la soledad siempre presente
Fiel compañera
La soledad que nunca, nunca abandona
Hoy te miro, me acompañas bella compañera
Bella soledad
Camino amigo
Copa amiga
Te olvido
Te desprecio
Soy más fuerte que tu
No te digo adiós
Solo hasta la vista
Fiel compañera
Hay un poema de un buen escritor que dice que la tristeza no tiene fin sin la felicidad. Sin mi me hago dueño de ella en una tarde más de dolor y soledad.
T.S
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