Viaje no en vano
Pasaron asi las horas, y llego el momento de despedirme. Eran cerca de las 22:00 horas, y aun podia tomar un bus que me dejaria en el terminal de mi ciudad temporal. Nos despedimos con un gran abrazo, le tomé la mano y le dije que estaria en contacto con él. Y contigo. Y que con toda seguridad nos veriamos el próximo mes. Luego camine sola por las calles santiagueñas, de vuelta rumbo a Talca. Asi lo hice, y llegué aqui cerca de las dos de la mañana. Y una vez ya acostada, me costo muchisimo dormir! Sin embargo estaba tranquila. Creo que conseguí lo que queria: ver al abuelo, acompañarlo y hablarle de ti. Con relación al tio Jaime, lamentablemente ni yo ni nadie, puede hacer nada. Y aunque quizas, él jamas sepa que aquella noche yo estuve alli, espero que de algun modo haya sentido tu presencia, a traves de la mia.
Tania Ortiz
Comentarios
0 comentarios