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reflexiónes desde las cloacas

SUEKIKOSAS, de vidas simples...

SUEKIKOSAS, de vidas simples...

(Visita también: Reflexiones desde las cloacas)

En este país, para estar enfermo hay que ser fuerte y estar sano

Una mujer cualquiera - de cualquier estrato social, de cualquier nacionalidad y de cualquier edad - va a la clínica municipal a la cual pertenece en Estocolmo, y dice en la recepción : “No me siento muy bien. Necesito una hora para el médico de turno.”
“Tiene que llamar por teléfono.” Le dice la enfermera-secretaria sentada al otro lado de la ventanilla.
”Pero, no me puede dar una hora ahora?”, pregunta la mujer cualquiera.
“No! Usted tiene que llamar aqui, para conseguir una hora!” le responde la enfermera-secretaria de manera brusca.
”Y si llamo, quién me atiende?” pregunta la mujer cualquiera con ingenuidad.
“Yo!” le dice la enfermera-secretaria.
“Ah!” dice la mujer cualquiera, y pregunta con inocencia dulce: “Y cuál es el número de teléfono al que tengo que llamar?”
“Está en la guía de teléfonos, búsquelo ahi!” responde la enfermera-secretaria y el pseudo-diálogo terminó alli.

Hay que ser fuerte y sano para luchar no solamente contra una enfermedad que puede acoger a cualquiera, sino también contra la burocracia sanitaria. O tener parientes que se preocupen de la situación médica de sus consanguíneos. Pero qué sucede con los que no tienen a nadie? Con los solitarios de este país, que son cientos de miles? O con los más débiles de la sociedad?

Mi propia conclusión es que, a pesar de todas las máquinas contestadoras conque cuenta la burocracia para frenar gritos de ayuda, y a pesar de todos los burocratillos detrás de pantallas computacionales, y de ventanillas que los amparan, la Salud Pública funciona a pesar de ellos. Pero esta deberia encaminar todos sus esfuerzos y recursos en ofrecer el mejor servicio posible a sus pacientes de manera mucho más eficaz, indiferentemente de si tienen acceso o no, a un número telefónico o a un celular para pedir ayuda médica calificada, o de sus recursos económicos.
Y a lo mejor estoy errado. Who knows?

Pero si nosotros no tenemos acceso a la Salúd, pues dejád que la Salúd tenga acceso a nosotros!

Comentarios

2 comentarios

Pablo -

No te precupes a mi me paso lo mismo en Casa de Galicia, en Montevideo.
Sali de la ventanilla, fui al tel publico que estaba enfrente (de la ventanilla),
a 3 mts para ser mas exacto.
Me atendió la misma que me atendio en la ventanilla y me dio el numero.

Roxana -

Entiendo que lo que paso no es muy "simpatico" por asi decirlo, pero le comento que cada consultorio medico tiene dias con horas especificas para ir sin necesidad de pedir hora.(Por ejemplo, Martes y Jueves de 8 a 10 es por orden de llegada).
Y que si se siente muy mal, usted puede ir al sanatorio de su zona donde la atenderan en el momento (por orden de llegada obviamente)
Y hay telefonos las 24 horas donde lo atenderan y le pueden aconsejar que tomar o a donde ir y lo derivan a un sanatorio donde lo estaran esperando. Y espero que ya este bien y que no necesite usar los servicios medicos!!